“Yo creo que los humanos también tienen capacidad de volar; el problema es que no sabemos concebir los pensamientos adecuados que nos permitirán levitar.”

M.J

jueves, 3 de julio de 2014

Capitulo 4



Capitulo 4

Han escuchado la expresión el día que la tierra se detuvo, pues jamas la había entendido tan bien hasta ese día, podía jurar que el único sonido en ese instante que resonaba fuertemente eran mis latidos, aquella sonrisa, aquella mirada, hicieron detener el tiempo una pequeña brisa soplo moviendo hacia su rostro un pequeño rizo   me había dejado sin respuestas o sin pensamiento alguno, recuerdo bien aquella forma tan natural en la que ladeo la cabeza, en cambio mi única reacción fue ponerme de pie como resorte y altamente sonrojada.

-Yo...yo..yo no lloraba- tartamudee un poco colocando un mechón de mi cabello tras mi oreja y bajando un poco la mirada, al levantarme me dolió un poco el raspón de mi pierna pero era mas mi vergüenza por dar semejante espectáculo. 

-disculpa no quería espantarte- dijo y dio un paso hacia mi continuaba con aquella sonrisa.

Di un paso hacia atrás di un bufido- yo no me espante...-

-tu pierna esta lastimada- dijo mirando mi pierna por lo que yo me sonroje aun mas y la cubrí con mi mano

-no te puedes ir así...-

-bueno...supongo que no me pasar nada, de todas formas he llegado tarde y...-me detuve a verlo un momento mas en busca de algún gafete o una cámara - y si tu también venias a la conferencia de prensa no te dejaran pasar-dije buscando con mi mitrada algún gafete, pero no vi nada.

Al escuchar eso sus cejas se arquearon de una forma de sorpresa tal vez era porque no creía que alguien no supiera quién era él, la mirada que me dio después y el sonrojo que se apoderaron  de sus mejillas me hicieron sentir nerviosa ,soltó una pequeña risa.

Tal vez su intención no era molestarme y menos con aquella risa tan dulce pero me sentí ofendida así que enarque una ceja, el al parecer noto mi disgusto y se puso serio.

-soy Michael- tomo mi mano con cuidado mi pequeña mano fue envuelta en aquella mano suave y larga.

estreche su mano- Emilie...-le mire una vez mas con cuidado , el me dio una sonrisa y yo quite mi mano. 

- ¿trabajas aquí? -

-¿si?- se quedo pensando un momento- iba al trabajo...eso creo, pero tu tienes que curarte esa pierna- 

Iba a contestarle algo cuando escuche un par de risas y gritos de niños.

-¿hay niños aquí?¿que es este lugar? -dije contemplando con mas detalle aquel lugar.

-si....deben ser mis sobri....- se corto de tajo- si deben de ser los niños que cuido...¿nunca habías venido a  Neverland?- cruzo sus brazos.

Levante una ceja- no...¿tu eres niñero?...el dueño debe de ser un empresario con muchos hijos...- dije caminando o intentándolo  pues cojeaba debido al raspón.

-¿y trabajas en la prensa?- dijo mirando mi gafete.

-si...-dije bajando un par de escalones del camino blanco que conducía a las puertas de la casa para ver con mejor detalle el enorme reloj- pero la realidad es que yo solo vine a tomar fotos y ahora a esperar a que todos salgan para ver si puedo encontrar al dueño y tomar una foto y no me despidan-suspire.

Esa vez su risa fue mas alta, yo estaba siendo de lo mas seria y su risa que parecía burla me irrito un poco no por su tono que era dulce si no por que me hacia sentir nerviosa  .

- en todo caso, ya no debería decirle nada- dije arrugando un poco la nariz.

el se quedo callado y me miro -Bueno tengo una idea...caminemos y te mostrare Neverland ...en lo que el "dueño" sale..- dijo de una forma tan dulce con una inocencia que solo había reconocido en un niño.

yo di un bufido y cruce mis brazos-pero...si alguien nos ve...nos podrían echar, solo me faltaría eso...sera mejor si  espero aquí...- dije sentándome en uno de los escalones.

Fue cuando un enorme hombre de traje negro se acerco.

-Mike...¿que haces aquí? ya llevas media hora de retraso- me dio una mirada y levanto una ceja.

Y antes de que el continuara hablando el se levanto acerco al inmenso hombre y lo llevo un poco mas lejos de mi , le dijo algo al oído y este solo asintió.

-listo vamos...- exclamo y me ofreció su mano- al dueño no le molestara que demos una vuelta ,sin olvidar que casi puedo asegurar que si tomas un par de fotos del lugar ,no te despedirán- sonrió

Yo dude un momento pero despues tome su mano....y es claro que ese día jamas iba a olvidarlo.








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